Regina Hubbard-Giddens, la ambiciosa mujer que interpreta Bette Davis en La loba (1941), es uno de los personajes más recurrentes, e importantes, en la obra teatral y cinematográfica de Hellman. La creó en 1939 para The Little Foxes, que se estrenaría el 15 de febrero en un teatro de Broadway con otra gran dama de la escena en el papel principal, Tallulah Bankhead, y dirección de Herman Shumlin, el predilecto de Hellman en sus montajes teatrales.
Cortadas por un mismo patrón interpretativo, Bankhead imponía en todo caso un físico y una expresión algo más dulce y relajada que la de Davis. El texto, cuando Hellman empezó a concebirlo, estaba bastante influenciado por experiencias reales de la familia de la madre de la escritora. Era su obra preferida, y también la que le costó más escribir. Regina, la despiadada mujer que se enfrenta a sus hermanos por el control de una plantación algodonera, se convirtió en una figura codiciada por cualquier actriz: además de Davis y Bankhead, la interpretaron en los escenarios Anne Bancroft –en montaje dirigido por Arthur Penn–, Geraldine Page, Elizabeth Taylor, Stockard Channing y Laura Linney, entre otras. En España se representó por vez primera en mayo de 1957 en el teatro María Guerrero de Madrid, con Elvira Noriega como Regina y un extraño cambio de título, el de Como buenos hermanos.
Hellman quería indagar más en las raíces de la maldad, la ambición y los conflictos familiares-capitalistas. Llegó a plantear la historia de los Hubbard-Giddens como una trilogía de la que solo escribió una segunda pieza que, cronológicamente, deviene la primera parte del gran fresco. Another Part of the Forest, estrenada en noviembre de 1946 en Broadway, es la precuela de La loba. Se ambienta en 1880, veinte años antes de aquella, en la casa de Markus Hubbard, padre de Regina: del matriarcado del anterior texto al patriarcado de este. Tendría su pertinente versión cinematográfica en el film homónimo de 1948 realizado por Michael Gordon. En el escenario, Hellman tomó el timón del proyecto encargándose personalmente de la dirección. En este distinto ecosistema familiar, Regina adquiere unas prestaciones distintas con la más dura Patricia O’Neal, en el teatro, y la más frágil Ann Blyth, en la película.
La música de la representación teatral de Another Part of the Forest la compuso Marc Blitzstein, buen amigo de Hellman y colaborador en los montajes de dos obras posteriores, The Autumn Garden y Toys in the Attic. Fascinado también por el personaje y su tremenda historia, Blitzstein compuso música y libreto de la ópera que lleva como título el nombre de la protagonista, Regina, estrenada el último día de octubre de 1949 en un teatro de la calle 46 de Nueva York. Esta adaptación lírica de La loba no tuvo mucho recorrido dado el carácter experimental de la propuesta, con mezcla de blues, espirituales negros y música sinfónica.
Regina Giddens no resulta tan feroz en esta adaptación musical. La interpretó la cantante sureña Jane Pickens, que vivió durante años en una plantación familiar de Georgia y creó un grupo musical con sus dos hermanas, Pickens Sisters. En un nuevo montaje de la ópera fechado en 1980, el papel lo asumió la soprano estadounidense Maralin Niska, una de las estrellas operísticas de Nueva York. El cinéfilo recordará a Blitzstein por ser el autor de The Cradle Will Rock, una obra de teatro musical y social de 1937 dirigida por Orson Welles para el Federal Theatre Project, cuya problemática gestación evocó Tim Robbins en el film del mismo título, estrenado aquí como Abajo el telón (1999). Hank Azaria dio vida a Blitzstein, Angus Macfadyen a Welles, Rubén Blades fue Diego Rivera y John Cusack el magnate Nelson Rockefeller.
Teatro, cine, ópera y, también, teevisión. Regina adoptó el rostro de Greer Garson en una adaptación televisiva de La loba realizada en 1956 por George Schaefer, y el de Carmen Bernardos en la versión de Pedro Amalio López de 1964 para el programa de Televisión Española Primera fila. Pura teatralidad catódica, en ambos casos, y aires clásicos de pulcro telefilme en el Another Part of the Forest (1972) de Daniel Mann, con Tiffany Bolling como la joven Regina, un imán para todo tipo de registros interpretativos.
Quim Casas