"Z365" o "Festival todo el año" es la nueva apuesta estratégica del Festival en la que confluyen la búsqueda, el acompañamiento y el desarrollo de nuevos talentos (Ikusmira Berriak, Nest); la formación y la transmisión de conocimientos de cine (Elías Querejeta Zine Eskola, Zinemaldia + Plus, Diálogos de cineastas); y la investigación, la divulgación y el pensamiento cinematográfico (el proyecto Z70, Pensamiento y debate, Investigación y publicaciones).
La fotógrafa zumaiarra Eva Franco expone en la Sociedad Fotográfica de Gipuzkoa su serie de retratos “Nosotras”, peculiares reinterpretaciones de personajes femeninos relacionados con la literatura y el cine góticos, principalmente, pero tendente también hacia otros espacios de la imaginación. Es el caso de la Reina de Corazones creada por Lewis Carroll en “Alicia en el país de las maravillas”, en una estampa rodeada de naipes en la que se acerca, a la vez que se aleja, del imaginario cinematográfico de este personaje en su divertida transformación en la película de Disney o encarnada por Helena Bonham Carter en la versión de Tim Burton.
Franco explora de forma muy imaginativa, estilizada y perversa, inquietante y fascinante, estos universos a través de las obras seminales del género gótico y también de sus creadores. Hay en la exposición –que consta de 13 fotografías– un retrato compartido de Mina y Lucy, las dos protagonistas femeninas de “Drácula”, vestidas, iluminadas y relacionadas entre sí de forma sugerente, y otro de Annabel Lee, el personaje del cuento homónimo de Edgar Allan Poe.
A su lado, la fotografía de Mary Shelley, la autora de “Frankenstein, o el moderno Prometeo”, es una representación casi biomecánica de la joven escritora que creó en una noche de tormenta, durante la celebrada recepción literaria en la Villa Diodati con su esposo Percy Shelley, Lord Byron y John Polidori, la seminal novela sobre el científico que desafía a Dios e insufla vida en un cadáver. Franco tiene la capacidad de revelar la aparente inocencia de los personajes, que miran siempre a cámara, entre tranquilos y desafiantes, sin dejar de lado la perturbación que anida en sus historias.
Fantasía, sexualidad y perversión se dan la mano en la fotografía que recrea a Erzsébet Báthory, conocida como la Condesa Sangrienta, una aristócrata húngara que cometió centenares de asesinatos, según la leyenda más o menos refutada por los documentos históricos, porque estaba obsesionada en ser eternamente bella y necesitaba la sangre de sus amantes y víctimas.
No es menos impactante la fotografía de la villana Lady Van Tassel de “Sleepy Hollow”, el cuento de terror de Washington Irving que también llevó a la pantalla Tim Burton: en versión adolescente, aparece en un bosque cubierto de hojas otoñales y color verde grisáceo, vestida con un traje gris azulado y con una calavera en el regazo; a su lado, el esqueleto del caballo tallado en madera parece contemplarla con unos ojos de un azul intensísimo. Una reinterpretación en toda regla de la historia original: respeta la imaginería gótica al mismo tiempo que captura con la cámara un universo absolutamente distinto y personal.
Quim Casas