Aquí se abrió hace un año una cajita de sorpresas llena de alegrías, que quizá se cierre ahora en el mismo sitio.Ya veremos”.Con estas palabras se ha referido Agustí Villaronga a su largometraje Pa negre, estrenado durante la pasada edición del Zinemaldia. “Llegamos con toda la inquietud y el susto que da presentar una película ante el público”; luego vinieron los aplausos, las críticas -buenas-, los reconocimientos, los nueve Goyas y, ayer mismo, el Premio Nacional de Cinematografía 2011. Es el último broche de la cajita o “ya veremos” -como ha dicho el propio Villaronga- , ya que la película ha sido seleccionada entre las tres finalistas para representar a España en la carrera por el Oscar.

El director mallorquín, que recibió ayer el Premio Nacional de Cinematografía 2011 de manos de la ministra de Cultura, Ángeles González-Sinde, en el Museo San Termo, confesó que “si hace un par de años me hubiesen dicho que iba a recibir un premio de este calibre hubiera pensado que era de ciencia ficción”. El jurado del premio ha querido reconocer la “visión poética” de Agustí Villaronga, así como “la capacidad de construir una mirada personal que ha logrado conectar con el público a través de su película,Pa negre”.

Un director de todos
Durante la entrega del premio, Ángelez González-Sinde ha estado acompañada por el alcalde de Donostia, Juan Karlos Izagirre, la presidenta de las Juntas Generales de Gipuzkoa, Loitzune Txarola, el delegado del Gobierno en Euskadi, Mikel Cabieses, y el director de ICAA ,Carles Cuadros Soto.

La ministra de Cultura se ha mostrado en contra de las opiniones que acusan a la gente del cine de meterse en política.“Políticos son nuestros miedos, nuestros deseos,nuestra ambición de hacer mella en la realidad, de pronunciar en alto una advertencia sobre lo injusto, lo oculto o lo incómodo; y Villaronga, en ese sentido es político”. Según la ministra, es ese énfasis en las cuestiones incómodas lo que hacían de él un director de culto, “un sobrenombre que lleva a veces consigo la resignación porque lo que uno anhela es hablar para cuanta más gente mejor y no para unos pocos conocedores exquisitos”. González-Sinde ha dado las gracias al realizador por pasar a ser “un director de todos con Pa negre, por hacer política con la belleza, indagar en nuestros temores y sus razones, y por su contribución infatigable y excelente a esa hermosa e imprescindible tarea que es hacer cine”.

Por otro lado, la titular de Cultura ha salido en defensa de la existencia de una industria
del cine real, frente a quienes dicen que “el futuro del cine es oscuro”. Ha subrayado que se ha pasado de producir 60 películas en 1995 a 186 en 2010, que el cálculo de puestos de trabajo en el sector supera los 30.000 empleos, que las escuelas de cine se han multiplicado y que la cuota de mercado del cine español en el último semestre ha sido del 18%. “Y esto es industria”, ha remarcado.

I.O.