No Problem Sonido es el estudio de David Mantecón, un sonidista que lleva más de veinticinco años trabajando en el cine, la publicidad y la televisión. Participa en Cine en Construcción aportando al Premio de la Industria la postproducción de sonido del filme premiado.

David Mantecón define a Cine en Construcción como “un polo de resistencia cultural. Es una lanza que rompemos en contra de la colonización cultural de las grandes compañías, principalmente de Estados Unidos, que monopolizan el cine y así como minan las industrias regionales van minando también las identidades culturales de cada región. Cine en Construcción en San Sebastián y los Reencuentros de Cine Latinoamericano de Toulouse posibilitan que el cine latinoamericano se difunda con la participación de productores y distribuidores europeos independiente”.

Para este sonidista el Premio de la Industria “es el más importante del Festival aunque no esté suficientemente reconocido por los medios o las instituciones. Tiene un valor económico de entre 100.000 y 400.000 euros que beneficia no sólo a la película premiada, porque se puede terminar, sino también a todo el cine de ese país. Es muy difícil hacer cine en Latinoamérica, filmar es muy caro, los estudios de post-producción son muy pocos y las salas están monopolizadas por películas estadounidenses. Cuando premiamos una película y empieza a hablarse de cine paraguayo, ecuatoriano, guatemalteco… sentimos que estamos premiando también a todos los que en esos países se atreven a hacer cine en circunstancias tan adversas”.

Cine con pocas posibilidades

En definitiva, David Mantecón defiende el derecho de todos a hacer cine, aunque reconoce que “todavía es un arte, una industria muy elitista y este es mi aporte para que eso empiece a cambiar. No Problem Sonido es un estudio en el que brindamos dedicación personal a cada proyecto, trabajamos con mimo cada película y apoyamos a los que se esfuerzan para hacer cine”.

No Problem Sonido participa desde el primer año en la concesión del Premio de la Industria, una participación que a David Mantecón le aporta la satisfacción de luchar “por lo que defiendo: que se terminen películas que sin este premio no podrían terminarse y que se estrenen. Aumentar el cine independiente por prepotencia de trabajo. Hasta hoy no hubo ningún beneficio económico, ni siquiera amortizamos la inversión pero llegará el día en que no sólo los de Hollywood puedan vivir del cine”.

Añade David Mantecón que Cine en Construcción le ha dado la posibilidad “de una modesta militancia por una cultura y una industria más abiertas, con más gente y más lugares. Y este es el sentimiento del Premio de la Industria. La decisión de cuál es la película premiada se toma en una asamblea de las empresas patrocinadoras, y cada uno tiene sus motivos para elegir una u otra y se discute mucho pero siempre prima entre todos las ganas de premiar una película que nos guste y que, sin el premio, puede que no se termine nunca. Hacemos posible un cine que tiene muy pocas posibilidades”.