Pocas filmografías como las de Philippe Garrel definen mejor el cine autobiográfico sin que parezca que el autor este hablando siempre de si mismo. Garrel ha hablado y sigue hablando de él (en un tiempo que fue duro habló especialmente de las adicciones). Pero sobre todo, habla de los demás. De las personas, generalmente mujeres, que han tenido un papel relevante en su vida. Muchos de sus filmes han girado en torno a Nico, compañera sentimental y actriz en el periodo más radicalizado del director, el de La Cicatrice interieure y Le Berceau de cristal. Heredero de la Nouvelle Vague, llegó siempre más lejos que Godard y Rivette, los extremistas de aquella nueva ola.

El Festival de San Sebastián dedicó a Garrel una completa retrospectiva en 2007. Hoy se presenta en Zabaltegi L’amant d’un jour, la última de las cinco películas que ha rodado desde entonces, entre ellas Un verano ardiente, la única estrenada comercialmente en nuestro país; lo hizo, sin duda, porque estaba protagonizada por Monica Bellucci.

La coherencia temática y estilística de Garrel es total. Sus historias de amor y desamor quedan marcadas generalmente por la diferencia de edad, como ha sido su propio caso. Aquí es la deriva emocional de una joven que, tras una ruptura amorosa, regresa a casa de su padre y descubre que este mantiene relaciones con una chica tan joven como ella. El tratamiento del blanco y negro –se escribió en una ocasión que Garrel era el último de los cineastas primitivos, y su blanco y negro remite a Murnau, Stiller, Von Stroheim– está en consonancia con la delicadeza con la que se cuenta esta historia, así como el empleo sencillo y mesurado de la música: aquí recupera, con el piano de Jean-Louis Albert, las cadencias melódicas que hace tiempo le ofreció John Cale.

Philippe Garrel es hijo de un soberbio actor, el ya fallecido Maurice Garrel. Nico, su compañera, fue actriz, cantante, modelo y musa warholiana antes de que los dos abrazaran demasiado a la dama blanca. Louis Garrel, su hijo, es una de las presencias incuestionables del actual cine francés. Caroline Deruas-Garrel, su actual pareja, es guionista de sus últimos filmes, además de directora. En L’amant d’un jour es Esther Garrel, su hija, quien encarna a la protagonista. Ya interpretó un papel relevante en La jalouise, film que inició la trilogía completada con L’ombre des femmes y L’amant d’un jour. rilogía de la transparencia. Transparencia de los sentimientos y de la puesta en escena de los mismos. Garrel domina un arte absoluto y que aún continúa perteneciéndolo solo a él.

QUIM CASAS