Heinrich von Kleist ha luchado con sus escritos contra Napoleón. En París, su hermana Ulrike, mujer de rasgos muy masculinos, intenta ser hombre por amor a su hermano. Pero Kleist se marcha a Suiza con su amigo Pfuel. Kleist quema su obra, trabaja con un carpintero y termina por volver con Ulrike y Pfuel. A las puertas de Berlín, los franceses le detienen como espía y le encierran en el Fuerte de Joux donde escribe la parte más importante de su obra, antes de morir de acuerdo con su época y sus ideas románticas.