Tras su paso por Cine en Construcción en la pasada edición del Festival de San Sebastián, la ópera prima de Benjamín Naishtat compitió en el Festival de Berlín y fue premiada como mejor película en el Festival de Jeonju. Cuando una ola de calor atenaza un barrio de los suburbios, los apagones y olas de contaminación llevan el orden social al borde del colapso, obligando a sus habitantes a encarar sus propios motivaciones, instintos y miedos.