En lo más profundo de los bosques del norte de Italia se oculta la cotizada trufa blanca de Alba. Deseada por los más adinerados clientes del mundo, continúa siendo un misterio tan aromático como extraño. No puede cultivarse ni encontrarse, ni siquiera con las excavadoras más modernas e ingeniosas. Los únicos seres de la Tierra que saben cómo desenterrarlas son un pequeño grupo de perros y sus canosos compañeros humanos, ancianos italianos que caminan con bastón y poseen un malvado sentido del humor y que solo van en busca de las trufas por la noche para no dar pistas a los demás. Sin embargo, este pequeño enclave de buscadores da pie a un intenso mercado que abarca todo el planeta.
Michael Dweck (Brooklyn, Nueva York), es un cineasta y artista visual conocido por proyectos fotográficos y cinematográficos en los que aborda los conflictos entre identidad y adaptación en entornos sociales amenazados. Gregory Kershaw (Utica, Nueva York) explora en su trabajo como cineasta la complejidad y la belleza de los seres humanos y su planeta. Ambos codirigieron en 2018 su primer largometraje, el documental The Last Race, estrenado en el Festival de Sundance, certamen al que han regresado este año con The Truffle Hunters. La película forma parte de la selección oficial de Cannes 2020, cancelado por la covid-19.